EN 10 PASOS SENCILLOS
Los calentadores de gas siguen siendo una de las soluciones más frecuentes para contar con agua caliente en el hogar. A pesar de que estos equipos solo generan agua caliente sanitaria (ACS) y no producen calefacción, también tienen sus ventajas con respecto a las calderas mixtas, que sí son capaces de producir agua caliente para ambos servicios domésticos. En el presente artículo te daremos varios consejos útiles sobre cómo instalar un calentador de gas butano Junkers en pocos pasos, de manera sencilla y práctica.
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Pasos previos a la instalación de un calentador de gas Junkers
- Elige el calentador adecuado. No solo hay que tomar en cuenta la cantidad de personas que viven en la casa y la cantidad de puntos de servicio de ACS, sino además el tipo de suministro de gas con el que cuentas, y si el espacio donde vas a emplazarlo es interior o exterior. Una vez que sepas tus necesidades, comunícaselas a un vendedor de calentadores para que te sugiera cuál es el equipo que mejor las cubre.
- Si vas a realizar una instalación desde cero, cerciórate de que el lugar elegido para instalar el calentador cuente con una toma de corriente a una distancia adecuada. Parece una nimiedad, pero no lo es. Si al final descubres que el cable del calentador no llega a una toma de corriente, vas a tener que realizar adaptaciones que posiblemente no te gusten.
- Si no vas a realizar una instalación desde cero y solo vas a realizar una actualización (por ejemplo, pasar de un calentador de cámara abierta a uno estanco), en el caso de los calentadores Junkers hay un alto porcentaje de compatibilidad de instalaciones, por lo que no tendrás que alterar demasiado la instalación que ya tenías. Las conexiones de gas y de agua coinciden en ambos casos.
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Instalando tu calentador en 10 pasos
Aquí tienes los 10 pasos para saber cómo instalar un calentador de gas butano Junkers:
- Elige el lugar más adecuado de la casa. Gracias a que la instalación será de butano, el combustible se almacena en una bombona que es totalmente móvil. Puedes elegir el lugar que más te convenga de tu hogar para ubicar el calentador (algo que sería distinto si se tratara de gas natural).
- Usa solo la pletina de sujeción: Procede a marcar la pared donde vayas a colocar la pletina de sujeción que te haya suministrado el fabricante en el empaque. Es importante utilizar este accesorio solamente, y nunca emplazar el calentador sobre tuberías de otras instalaciones, llaves de paso, ni sobre cualquier otro tipo de superficie de estabilidad precaria. Puede que estando vacío el calentador aparente no pesar mucho, pero una vez que esté lleno comenzará a pesar considerablemente y podría caerse o quebrar las Instalaciones, con todos los peligros que eso acarrea.
- Al taladrar evita las tuberías de agua: Una vez que marques exactamente cómo va quedar la pletina en la pared, procede a taladrar los agujeros. Antes de taladrar, asume como referencia vertical las salidas de agua. Es probable que las tuberías internas de agua estén colocadas en sentido vertical cruzando por la línea de la toma. Si taladras justo ahí, podrías perforar las tuberías. Así que siempre taladra fuera de esa línea vertical. Atornilla correctamente la pletina y emplaza el calentador en la pared.
- Colocando los latiguillos de entrada y salida de agua: Ha llegado el momento de instalar la entrada y la salida de agua. Para hacer esto lo mejor es guiarse por el manual del fabricante, que indicará cuál es la entrada y cuál es la salida. Es importante colocar correctamente las juntas, y es muy buena práctica instalar una llave de paso en la entrada de agua, ya que esto facilitará cualquier trabajo futuro.
- Realiza una prueba de agua antes de continuar: Resulta inteligente hacer una prueba de agua antes de proceder con otros pasos. Si se hubiera cometido algún error, va a ser más sencillo de remediar en este punto que después. La prueba consiste simplemente en abrir un grifo de agua caliente de la casa y luego abrir la llave que da entrada al agua en el calentador. Si el agua sale por el grifo, todo está quedando correctamente. Cierra la llave de paso de entrada al calentador.
- Realizando la instalación del gas: Como dijimos antes, instalarle la toma de gas al calentador resulta sencillo gracias a que se trata de una bombona de butano. Solo hay que colocar y enroscar con la mano la tuerca correspondiente de gas (asegúrate de que la tuerca entre recta en la rosca). Pero es muy importante colocar correctamente la junta para evitar fugas. No obstante, como paso siguiente...
- Realiza una prueba de gas antes de continuar: Como medida de seguridad, realiza una comprobación de la instalación del gas, con el objetivo de saber si hay alguna fuga. Por supuesto, esta comprobación nunca se debe hacer con un encendedor ni con ninguna otra fuente de llama. La comprobación se debe realizar utilizando espuma de algún tipo (puede ser perfectamente espuma de detergente o jabón caseros). En caso de que haya fugas, la espuma producirá burbujas. Si no las produce, no hay fuga.
- Emplazando el tubo de evacuación de gases: Las salidas de gases, sean de calderas o de calentadores, cuentan con una normativa precisa que debe seguirse al pie de la letra. Como por ley solo se pueden instalar calentadores estancos, se da por sentado que tu salida de humos no necesariamente tiene que ser vertical. En este tipo de equipos, la expulsión de gases la realiza una turbina. Tu equipo debe de haber traído una salida de humos de fábrica. Si el exterior queda cerca del calentador, con esa salida de humos genérica será suficiente. De lo contrario deberás adquirir una más larga. En cualquier caso, guíate por el manual de fábrica para emplazar la salida de humos.
- Poniendo en marcha el calentador: Si ya has comprobado que todo quedó bien puesto: el calentador en su platina, los latiguillos de entrada y salida de agua, la tuerca de gas sin fugas, y la salida de gases, entonces procede a encender el calentador luego de conectarlo a la red eléctrica. En los modelos estancos de Junkers el encendido consiste simplemente en pulsar el botón de On.
- Una prueba para disfrutar del agua caliente: Dale tiempo suficiente al calentador para que trabaje. Acércate hasta un grifo de agua caliente de tu hogar y ábrelo. Si sale agua caliente, lo has hecho todo bien, y solo te queda disfrutar del confort del ACS de ahí en adelante.
Consejos generales para la instalación de un calentador de gas
- Te recomendamos que para realizar este tipo de instalaciones siempre recurras a técnicos cualificados. Son muchos detalles, y si cualquiera de ellos sale mal puede resultar peligroso. Un técnico debe contar con una larga experiencia, con las herramientas indicadas, y con el conocimiento necesario de las nuevas normativas acerca de las instalaciones de calefacción y ACS.
- En favor de mayor economía de combustible y menores facturas a fin de mes, se recomienda que elijas un calentador con las dimensiones adecuadas para tu hogar, según la cantidad de personas y la cantidad de puntos de servicio de agua caliente.
- Si vas a realizar una instalación nueva, es obligatorio que se trate de un calentador de tecnología estanca y de bajo NOx. Las normativas actuales sóoo permiten la instalación de este tipo de tecnología, ya que es la que menos emisiones contaminantes provoca.
- Planifica junto con el técnico de instalación, para que la salida de humos se realice adecuadamente según el espacio donde vayas a poner el calentador, y según las características de tu vivienda.
Ventajas y desventajas del gas butano como combustible
No está de más hablar sobre las diferencias entre propano y butano, y sobre las ventajas y desventajas de uno respecto del otro. El butano y el propano son de los llamados gases licuados del petróleo (GLP). Las principales ventajas del propano son su baja temperatura de congelación (hasta -40 °C) y su capacidad para calentar espacios amplios. Esto significa que el propano tiende a demorarse más en congelar que el butano y que es idóneo para lugares con climas fríos o con heladas, además de que puede usarse fuera de los espacios hogareños.
Sin embargo, la instalación de propano es más costosa y menos autónoma que la de butano. Por eso elegir el butano con respecto al propano sigue siendo lo más común. Su instalación es más económica, su autonomía de combustible es mayor, y resulta perfecto para espacios reducidos como los hogares, aunque no sea recomendable para climas fríos, porque se congela a 0 °C.
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