Qué es y cómo utilizarla
La válvula termostática del radiador es uno de los componentes de tu sistema de calefacción que más confort generan. Te permite regular la temperatura y llevarla exactamente a su punto más agradable en cada momento y en cada habitación. En este artículo te hablaremos todos los detalles que debes saber sobre el tema: qué es y cómo funciona una válvula termostática de radiador de calefacción, cómo instalarla, sus principales averías y cómo resolverlas.
Qué es y cómo funciona una válvula termostática de radiador
Como su nombre indica, una válvula termostática de radiador es válvula y termostato al mismo tiempo, y va ubicada en el radiador del sistema de calefacción. ¿Pero qué significa todo esto visto con más detalles?
Una válvula termostática es un componente de control con función de termostato, que nos permite subir, bajar o programar la temperatura de confort en cada radiador por separado. Esto significa que la válvula termostática permite un máximo de personalización de la temperatura de consignación en cada estancia, sin necesidad de usar más de una caldera.
Si bien el termostato ambiente normal permite regular de modo general una única temperatura de confort, la válvula termostática permite modificar la temperatura de confort para cada estancia donde haya instalado un radiador.
Estructuralmente, la válvula termostática se compone de los 2 siguientes elementos principales:
- Cabezal termostático: Es la perilla numerada que permite al usuario establecer la temperatura que desea que emita el radiador. Va colocada exactamente encima del sensor de temperatura ambiente.
- Sensor de temperatura ambiente: Es un dispositivo que contiene algún material que se expande o se contrae como reacción a la temperatura ambiental, de manera que abre o cierra la entrada de agua caliente al radiador. El material sensible al calor puede ser cera, un líquido o un gas.
La válvula termostática normalmente se instala en la entrada de agua del radiador, para que controle el caudal de agua caliente que penetra en el mismo. Pero no se regula la entrada manualmente, sino automáticamente. Su funcionamiento se basa en colocar la cabeza de la válvula en la temperatura deseada, y luego el sensor detectará la temperatura ambiental, y dejará pasar el agua o le cerrará el paso en función de mantener la temperatura de consigna.
Diseños de la válvula termostática de radiador y sus aplicaciones
La válvula termostática de radiador se diseña en algunas variantes, que amplían sus aplicaciones y sus posibilidades de instalación. veamos algunos ejemplos de diseño de válvula termostática de radiador y sus usos.
Válvula termostática de cera, líquido o gas
Este criterio de clasificación de la válvula termostática de radiador se basa en la sustancia termosensible que contenga el sensor de temperatura ambiente que se ubica dentro del cabezal termostático. Dicha sustancia termosensible puede ser:
- Cera: La válvula termostática de cera es la más tradicional, pero se usa cada vez menos, debido a su acción retardada, a su poca durabilidad y a su alto nivel de histéresis (poca capacidad de volver a la posición anterior luego de cumplido el ciclo).
- Liquido: Se usa más que las de cera gracias a que reacciona mejor y tiene una mayor durabilidad.
- Gas: La válvula termostática de gas es la más usada, ya que reacciona muy bien y rápido a la temperatura ambiente, y tiene una larga durabilidad.
Válvula termostática vertical, horizontal, de escuadra o escuadra invertida
Este criterio de clasificación se refiere más bien al diseño, y responde a la posición en que sea necesario colocar la válvula termostática en función del tipo de radiador, del tipo de instalación, o incluso en función de la estética que desee el usuario para su instalación.
Esta variedad de diseños se vuelve imprescindible, por ejemplo, en el caso de instalar válvulas termostáticas en radiadores de instalaciones que ya están hechas y en las que hay que adaptar la colocación de las válvulas a reglas dictadas por el espacio y la instalación.
Válvula termostática en diseño de bitubo o monotubo
Las válvulas termostáticas bitubo son las más comunes, son las que normalmente se usan, y se instalan en sistemas de radiadores que tienen entrada y salida de agua por separado. En cambio, las válvulas termostáticas monotubo son aquellas en las que los radiadores se montan en serie con una sola tubería.
En las instalaciones con válvulas termostáticas monotubo, el retorno del primer radiador hace de ida del segundo, y así sucesivamente. Esto significa que las válvulas termostáticas monotubo cuentan con una instalación más económica, con menos tuberías, aunque en este caso el cálculo de superficie radiante de cada radiador debe medirse con gran exactitud.
Válvula termostática electrónica o inteligente
Como indica su nombre, este tipo de válvulas termostáticas son electrónicas, digitales o inteligentes, lo que garantiza un máximo de eficiencia en su funcionamiento y un mínimo de esfuerzo en el manejo por parte del usuario.
Algunas válvulas termostáticas digitales tienen conexión WiFi, y funciones tales como:
- Panel de control a distancia: Este tipo de válvula termostática de radiador se puede controlar a distancia mediante algún dispositivo móvil o smartphone.
- Incluye modos ECO y CONFORT: Tal como ocurre con las generaciones más modernas de calderas y calentadores, la válvula termostática electrónica o inteligente incluye el modo CONFORT para gasto normal de combustible, y el modo ECO para ahorrar combustible y reducir las emisiones contaminantes.
- Regulación inteligente: La válvula termostática de radiador analiza el ambiente de la estancia y ajusta la calefacción en tiempo real, según la incidencia de los rayos solares, la cantidad de personas y otros detalles que estén ocurriendo.
- Detección de ventanas abiertas: Siempre que la válvula termostática inteligente detecta que hay alguna ventana abierta en la estancia, presupone que no es necesaria la calefacción en esa habitación y la apaga, con el objetivo de evitar el derroche energético.
- Alternancia entre control automático y manual: Siempre que el usuario lo necesite, puede añadir reglas de control o programar manualmente la válvula termostática del radiador; por ejemplo, puede aumentar o reducir manualmente en un nivel especifico la temperatura de una habitación durante un tiempo determinado.
Ventajas de usar válvula termostática de radiador de calefacción
- Comodidad para los usuarios de la caldera: La primera y más evidente ventaja de usar válvula termostática de radiador es la comodidad para el usuario. Al funcionar de manera automática, el usuario solo tiene que establecer la temperatura que desea, y la válvula se ocupara de manejar el caudal de agua caliente que entre al radiador.
- Máxima personalización de la temperatura de consigna: La válvula termostática de radiador permite subdividir la temperatura de consignación mantenida por el termostato ambiente general, en temperaturas personalizadas para cada radiador, de manera que cada casa (cuando la calefacción es de edificio y con repartidor de gastos), cada habitación o cada persona puede tener la temperatura que desee.
Reducción del consumo de energía, factura y emisiones: Se ha investigado el hecho de que la sustitución de los controles manuales de calefacción por válvulas termostáticas de radiador, puede permitir un ahorro de entre un 15 y un 37 % en el consumo de combustible (en dependencia del tipo de válvula termostática elegida, su correcta instalación y el grado de aislamiento). Esto también, por supuesto, genera una reducción sustancial en las facturas y en la emisión de gases contaminantes a la atmósfera, lo que permite que la calefacción cumpla con las nuevas normativas europeas.
¿Es obligatorio usar válvula termostática en cada radiador de calefacción?
No es obligatorio usar válvula termostática en cada radiador de calefacción de la casa. No obstante se recomienda instalarla en los radiadores principales, si bien es necesario dejar siempre algún radiador sin válvula termostática, en especial si se trata de un sistema de calefacción central de un edificio.
La cuestión es que si se instalan válvulas termostáticas en absolutamente todos los radiadores, y si por casualidad se cerraran todas las válvulas termostáticas a la vez, la caldera se quedaría sin circulación y esto generará problemas de funcionamiento y bloqueos.
El R.I.T.E. (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios) aconseja colocar válvulas termostáticas en los radiadores de calefacción de todas las habitaciones principales de la casa (es decir, en el comedor, la sala de estar y los dormitorios). Pero tal vez has notado que, por ejemplo, el radiador del cuarto de baño no suele tener válvula termostática. ¿Por qué es así?
Al no ser el baño una estancia donde permanezcamos demasiado tiempo, se elige el radiador del baño para dejarlo sin válvula termostática, a modo de medida de seguridad, para que nunca ocurra que hayamos decidido cerrar todas las válvulas termostáticas a la vez, y siempre quede al menos una abierta.
Cómo instalar una válvula termostática para radiador
En este apartado responderemos a la pregunta frecuente de: ¿Como instalar una válvula termostática al radiador? Sigue estos pasos:
- Primeramente purga el radiador en que vayas a instalar la válvula termostática. (Si necesitas un tutorial para saber cómo purgar radiadores, lee nuestro artículo dedicado a ello.)
- Ahora retira la válvula de entrada de agua del radiador, incluidos los racores.
- Cerciórate de adquirir el mismo tipo de válvula termostática adecuada, que corresponda a la posición de las roscas. Para más detalles sobre esto, ver en el presente artículo la sección “Diseños de la válvula termostática de radiador y sus aplicaciones”, pero sobre todo te recomendamos que acudas a un proveedor de repuestos de fontanería, le muestres la llave de entrada, le digas que vas a sustituirla por una válvula termostática, y que te suministre una con el diseño que coincida. (Ver las válvulas termostáticas a la venta en Suner.)
- Una vez que tengas la válvula termostática adecuada, instálala en el mismo lugar donde estaba la llave de entrada de agua, sin dejar de añadir teflón a las roscas.
- Llena el radiador de agua normalmente, y cuando esté lleno, púrgalo nuevamente para expulsar el aire que pueda haber entrado.
Principales problemas y averías de válvulas termostáticas
Las averías en las válvulas termostáticas de calefacción pueden ser varias. Por supuesto, el problema más básico que puede tener una válvula termostática es una fuga de agua, desde un pequeño goteo hasta un gran salidero. Es un problema básico que puede generar otros problemas, como la baja presión de la caldera hasta el punto de bloquearla, algo que en este caso no se resolverá rellenando de agua el sistema. La mejor solución para eso es sustituir la válvula termostática. Si necesitas un tutorial sobre estos temas, te sugerimos que leas nuestro artículo Cómo reparar un radiador en casa. ¡Hazlo tú mismo!
Otros problemas en la válvula termostática del radiador pueden ser:
- Que los radiadores no funcionen correctamente luego de instalar las válvulas, por problemas de reglaje.
- Que las válvulas no se instalen bien, dejen entrar aire al radiador y haya necesidad de purgarlo con excesiva frecuencia.
- Que la mala instalación provoque que las válvulas termostáticas no detecten bien la temperatura ambiente, ya sea porque queden expuestas al sol o muy cerca de focos de calor.
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