Si te has preguntado cómo funciona un termostato de calefacción, este es tu artículo ideal. Aquí hablaremos todos los detalles sobre esta interesante pieza de tu sistema de calefacción. El termostato está ideado para aumentar el confort de tu hogar, ya que te permite no tener que estar pendiente de la caldera. Tiene la función de nada menos que mantener constante la temperatura de consignación que hayas programado, sin que tengas que encender o apagar tú la calefacción. Es algo así como el centinela del bienestar térmico de tu familia. Miremos con detalle cómo funciona un termostato de calefacción.
Un termostato es un componente que abre o cierra un circuito en dependencia de una temperatura prefijada. Esto se cumple para cualquier termostato, sea de calefacción o refrigeración, motores de combustión interna, radiadores, etc.
Aquí hablaremos sobre los termostatos de calefacción, específicamente sobre el “termostato ambiente”: el que se ubica en alguna habitación, sobre la pared o una mesa. Tiene muy diversas funcionalidades y diseños. Ya no sólo se busca que resuelvan el confort térmico de la casa, sino que además sean estéticamente agradables y elegantes, y se incorporen a la decoración del hogar.
Para comprender mejor qué es un termostato, también es bueno responder a la pregunta: ¿Cuáles son las partes de un termostato? Como hay distintos tipos de termostato, el diseño puede cambiar de uno a otro, por lo que cuando hablemos de cada tipo diremos brevemente lo particular de su estructura.
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Luego de saber qué es un termostato, la pregunta es: ¿Cómo es el funcionamiento de un termostato? O mejor: ¿Cómo funciona un termostato para mantener una temperatura constante? El termostato se ocupa de cerrar o abrir el circuito de encendido de la caldera en función de conservar la temperatura que hayamos programado.
La forma como funciona el termostato de calefacción es bastante lógica. Cuando detecta que, en el ambiente donde esté colocado, la temperatura es menor que la temperatura de consignación, cierra el circuito, la caldera enciende, aumenta el calor hasta la temperatura exacta programada, y una vez alcanzada la temperatura de consigna, el termostato abre el circuito y la caldera se apaga. Así lo hace cíclicamente de forma automática.
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Actualmente existen como mínimo 5 tipos de termostato de calefacción. Veámoslos con detalle.
El termostato analógico, aunque su tecnología es sencilla, no ha caído en desuso. Todavía se utiliza, aunque cada vez menos, debido a las ventajas de los nuevos tipos de termostato, que permiten mayor precisión, interfaces más amistosas, y otras posibilidades nuevas. Pero su sencillez sin complicaciones y su precio económico, permiten que todavía el termostato analógico no caiga totalmente en desuso.
El termostato analógico funciona mediante distintos principios de tecnología mecánica, por lo que existen varios tipos de termostato mecánico. Los principales son:
Se recomienda ubicar el termostato mecánico o analógico en una zona de temperatura intermedia en la casa, ni en la zona más fría ni en la más cálida. Aunque eso también depende de las decisiones del usuario, que deberá tomar en cuenta su situación climática específica.
El termostato digital realiza sus funciones mediante tecnología digital y componentes electrónicos (ya no analógicos). Es realmente el salto más grande desde el termostato analógico o mecánico. Perfectamente se puede considerar que el resto de los tipos de termostato de aquí en adelante son mejoras realizadas al propio termostato digital.
El termostato digital permite una mayor exactitud en las mediciones de temperatura, una relación más precisa entre las necesidades reales de calor y el funcionamiento de la caldera, una mayor facilidad de manejo gracias a la interfaz digital que se le incorpora, y en general facilita un abanico más amplio de funcionalidades y programaciones.
El cronotermostato es un tipo de termostato que va un paso más allá del ya clásico termostato digital. Añade la función de programación por horarios. Permite la creación de perfiles de temperatura de consignación en función de los horarios del día, del día de la semana o de la estación del año, todo ello adaptando la temperatura de consignación a las necesidades reales de cada momento.
Al hacer posible combinar la programación de temperatura de consignación con los horarios y temporadas, el ajuste es más real, y ello suele favorecer un ahorro notable en cuanto a combustible y en cuanto a factura.
Ofrece funcionalidades múltiples, tales como el hecho de ser inalámbrico (posibilidad de moverlo de lugar), permite una muy amplia gama de programaciones, es posible controlarlo mediante aplicaciones de dispositivos inteligentes (smartphones, tables, smartwatch, etc.), incluso controlarlo y programarlo a distancia (vía Internet), sin estar en casa. Se diseñan con las más variadas formas, incluso con estética retro que los hace tener una apariencia semejante a los termostatos analógicos.
Especialmente gracias a su diseño inalámbrico, resulta ideal para casas donde la temperatura oscila mucho entre un horario y otro o entre una zona u otra del hogar, ya que al no tener cable, permite mover el termostato siempre que haga falta, sin tener que modificar nada de la instalación.
El termostato modulante es uno de los inventos más valiosos de los últimos tiempos en términos de ahorro de combustible y de reducción de las emisiones contaminantes. ¿Cómo funciona un termostato modulante? Su ventaja esencial consiste en que es capaz de adaptarse con extraordinaria precisión a las necesidades térmicas de cada instante, incluso por anticipación, si se le incorpora una sonda exterior que detecte e informe sobre la temperatura fuera de la casa.
Frente al termostato modulante ya no estamos en presencia de un termostato “interruptor” que se enciende o se apaga, sino de un termostato capaz de modular los servicios de la caldera para que dé exactamente el calor que se necesita cada vez, ni menos ni más. Es una especie de sonda de temperatura que de manera continuada envía información térmica a la caldera. Esto implica un ahorro extraordinario de energía y dinero.
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Ahora te daremos varios consejos para que sepas dónde debes poner el termostato de la calefacción. No obstante, usa tu buen criterio para combinar estos consejos que daremos con las indicaciones que te dé el manual del fabricante de tu termostato.
O lo que eso mismo: ¿Cómo saber si falla el termostato de la caldera? Hay algunas cosas que puedes poner en práctica para saber si el termostato está funcionando bien o no:
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